23 septembre, 2010

El presente de mis noches

En el balcon de mi departamento habita una doncella de cabellos dorados,
una doncella que fuma y que larga el humo hacia abajo de todo (la ciudad alla abajo)
y que ríe pero muchas veces llora y sus lagrimas se vuelven negras en su rostro.
Camina lenta y pausadamente. ¿en espera de alguien/algo? No lo sé. No sé por qué eligio mi hogar como su hogar. Ella observa el futuro como una sombra ambigua y borrosa.
Yo observo el presente y veo una niña-mujer desolada y desorientada que cayo en mi terraza una noche silenciosa y con un tinte psicotico.
De dia se viste de sol (sonriente sol) y de noche se viste de muerte, dolor... desesperacion. Y de sus dedos veo sujeto un cigarro que arroja unas agonizantes cenizas sin sentido, y una cara palida y confusa.
No me atrevo, no me atrevo ni un segundo a mirarla a los ojos que parecen un lago sin vida, olvidado... La tristeza podria ser contagiosa, y esa doncella cada noche parecia tragicamente triste.
Cómo pudo llegar a mí una niña asi... Y comprendí que ese era mi angel, ese era el espejo que reflejaba lo que yo en verdad era. La luz del dia, entre tanta gente hacia que me camuflara con una sonrisa ingrata en mi rostro, y que mis pies circulen apurados por la ciudad, sin que nadie ni yo misma me pudiera dar cuenta de mi soledad, de mi infelicidad...
La noche caia y esa sonrisa barata se empezaba a desdibujar de mi cara. Y veia a esa insegura doncella caminar por el balcon sola. [Sola Sola.] [¡Eureca!]
Esa doncella era mi pasado. PRESENTE y dependia de mí permitir que tambien sea mi Futuro.
Era hora de cambiar, de dar vuelta el reloj de arena Y de empezar nuevamente. Sin ese espejo, ese rostro suicida.

Aucun commentaire:

Enregistrer un commentaire