Y me pasa algo raro cada vez que te recuerdo: empiezan a temblarme las piernas, como cuando te veo que pierdo la linea al caminar y siento que si te tengo en frente podria caerme a tus pies porque me haces muy debil. ¿Sabes? soy debil ante tu presencia, soy totalmente impotente y me ridiculizo porque me haces perder la cordura. Me haces mal, me haces bien, me duele verte, me encanta verte, me gusta que te rias de mis pendejadas, me duele que creas que soy tan pelotuda...
Tan pelotuda como para ridiculizarme tanto solamente para robarte una sonrisa o una carcajada para poder recordarlas en estos momentos en los que te siento demaciado lejos.
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